martes, 29 de septiembre de 2015

Necesitamos un par de personas que hablen mal de nosotros

Es curioso que Jesús nos invite a preocuparnos en el momento en que todos los hombres hablen bien de nosotros; cuando, en realidad, una de las cosas que más nos preocupan es quedar bien con los demás, y hasta lo consideramos una causa justa.

«¡Ay de vosotros, cuando todos los hombres hablen bien de vosotros! porque así hacían sus padres con los falsos profetas», dijo Jesús (Lucas 6.26 RVR1960).